¿Quién es Antonio Otón?
Soy un cartagenero convencido y amante de mi ciudad. Muy amigo de los que considero mis amigos. Alguien capaz de estar varios días saliendo hasta las tantas, como de estar comidiéndome una pizza en el sofá viendo series y películas aislado del mundo.
¿A qué te gusta dedicar tu tiempo si no estás trabajando?
Tengo bastantes aficiones y hobbies que me gusta hacer en mi tiempo de ocio.
Unas de mis pasiones es jugar a videojuegos en cualquier plataforma (PlayStation, PC, Nintendo Switch). Al igual que el cine fue en su día una “corrupción” del arte y los libros era lo culto, creo que hoy en día los videojuegos están igual de estigmatizados. Para mí, es la evolución natural de una forma de arte y de contar historias que trae el mundo tecnológico en el que vivimos.
Tengo una perrita con la que me gusta mucho ir a pasear y a hacer rutas de senderismo/montaña. En temporada de invierno hacer Snowboard. También voy a los karts cuando consigo liar a mis amigos. Tocar el bajo, escuchar música, ver series y películas, cuando me recupere de la pierna volver a hacer deporte…
Me falta tiempo para poder hacerlo todo.
¿Cuáles son tus tres bandas de música favoritas?
Sin ninguna duda mi banda por excelencia es Queen. Desde que los escuché por primera vez supe que su música era realmente especial, nunca me canso de escucharlos. De ahí saque mi afición por tocar el bajo y formar una banda. Todo muy típico juvenil.
Por lo general, soy bastante rockero/heavy. Lo que me gusta es toda la música “antigua”, aunque hay buenas bandas creadas en este siglo. Me costaría decir cuales son la segunda y tercera porque depende mucho de la época. Ahora mismo estoy muy metido con Blind Guardian y Beast in Black. Época más heavy.
¿Cuál es tu libro favorito?
No he sido muy lector en mi juventud, pero puede que, por cosa de la edad, estoy cogiendo bastante el hábito. El libro que me hizo engancharme a la lectura (y del que diría que es mi favorito hasta la fecha) es Cien años de soledad de Gabriel García Márquez.
A partir de ahí he intentado sumergirme en los clásicos, pero vi que no era una lectura que pudiese hacer de forma recurrente. Así que empecé a intercalarlos con libros de la época de Roma (que siempre me ha interesado mucho), tanto obras como novelas históricas. Últimamente leo mucha historia de fantasía, sobre todo de Brandon Sanderson. La trilogía Nacidos de la bruma como punto de partida en su universo. Creo que he encontrado mi género.
¿Cuál es tu serie favorita?
Aquí también es fácil, Sons of Anarchy. Es una serie de la cual no esperaba nada, ni siquiera que me gustase, y me encontré con una trama shakespeariana que me atrapó completamente. Si que es cierto que al final flojea un poco, pero lo que me hizo vivir durante toda su emisión fue brutal. La he visto como 3 veces. Por supuesto que también me parecen obras maestras series como Breaking Bad o Juego de Tronos, que me parecen sublimes también, pero no se elige lo que te toca de forma especial.
¿Cuáles son tus aficiones?
Básicamente todo lo comentado anteriormente en las cosas que suelo hacer fuera del trabajo. Si que podría destacar en concreto, por supuesto, el jugar a videojuegos e ir viviendo las distintas historias que cada uno de ellos cuentan mientras tu eres el que interactúa con él.
La Formula 1 es algo que descubrí desde niño, cuando Pedro de la Rosa comenzó a correr allá por el 1999, y desde entonces espero como agua de mayo los mundiales todos los años. Los domingos en los que hay carrera es fácil encontrarme.
Otra afición que me encarta hacer es viajar. Siempre estoy con mi pareja planificando el siguiente viaje. Descubrir sitios y culturas. Italia, Egipto, México… entre algunos ya visitados, pero queda mucho por explorar.
Y otra cosa que para mí es una afición/pasión es la comida. Todo el que me conozca sabe que me encanta comer. No hay semana que no salga con mi pareja y amigos a probar un restaurante nuevo. Hilándolo con los viajes, probar la gastronomía de cualquier sitio.
¿Cómo te describirían tus amigos?
Lo que más he escuchado de ellos es que soy una persona leal y alguien en quien se puede confiar plenamente. Una persona que siempre intenta ayudar a los demás. También dirían que soy muy “atascado” y cuando algo me entra entre ceja y ceja, lo hago, aunque sepa que me está quemando.
¿Qué habilidad te gustaría perfeccionar para llegar a dominar totalmente?
Refiriéndose a una habilidad que tenga, sería programar, pero en todos los lenguajes relacionados con videojuegos. Me encantaría haberme dedicado de pleno a ese mundo.
Y más que perfeccionar, es una frustración de mi vida los idiomas. Ojalá y se me diesen bien, pero soy negado. Tener soltura con el inglés y poder ver todo el contenido digital de vídeos, series y películas sería increíble.
¿Cuál sería un buen título para tu autobiografía?
“Qué va, no. Bueno, al final sí”
¿Cómo definirías tu tipo de sentido del humor?
Muy básico. Soy de hacer y reír bromas absurdas y fáciles. Y cuando cogemos a algún amigo de “sparring” y se las lleva todas.
¿Cuál crees que es la mejor característica que debe tener un Service Manager?
Desde mi punto de vista, hay dos cosas básicas que debe de tener un Service Manager. Ser organizado y ser empático. Son dos características que son intrínsecas a la forma de ser de una persona. Considero que todas las demás habilidades se pueden desarrollar con trabajo, de forma más o menos pronunciada, pero estas dos tienen que venir con la persona. Y para mí, son imprescindibles para realizar eficientemente el trabajo.
¿En los próximos años, cuál crees que será el papel de la tecnología en los procesos de innovación en vuestro sector?
Por supuesto que tendrá una relevancia enorme. ¿En qué sentido? Eso es más difícil preverlo. Hace 40 años creíamos que íbamos a estar en esta época en coches voladores, y ni nos aproximamos. Pero en cambio, se está desarrollando una Inteligencia Artificial que empieza a asustar.
Una posibilidad es que, en un futuro a medio plazo, los programadores y programación cambien radicalmente y, más que ser expertos en lenguajes, se tenga que tener conocimiento de manejo de IAs que se encargarán de realizar el propio trabajo de programación. O desaparecerá el mantenimiento de aplicaciones porque una IA lo gestione… Quien sabe. Siempre se ha soñado con un futuro y cuando se ha llegado a él ha sorprendido de otra forma.
¿Cómo logras motivar al equipo de desarrollo en los proyectos?
Siempre intento mantener un objetivo al alcance y otro objetivo a largo plazo. Una metodología que me gusta para ello es establecer pequeños hitos y objetivos que vayan llegando o alcanzándose, principalmente en lo referente al proyecto en el que estamos trabajando.
Y en cuanto a largo plazo, hay que plantear objetivos que supongan un crecimiento personal y profesional para la persona, ya sea mediante cursos, certificaciones o cualquier cosa que suponga adquisición de conocimientos, como cambio de tecnologías, proyectos o mejora en la carrera profesional.
La cuestión es mantener viva e inquieta a la gente y de esta forma también se puede ver quien está al pie del cañón.
En esta nueva realidad del teletrabajo, ¿cómo manejas equipos y proyectos de forma remota?
En Kiteris usamos la herramienta de Teams. A través de ella, organizamos todo el trabajo, comunicación, reuniones…
Cuando alguien nuevo se incorpora al equipo, suele haber un proceso de onboarding donde, dependiendo del nivel que tenga, suele durar unos pocos días o alguna semana. Durante ese periodo se le pone al tanto de la forma en la que se trabaja, estructura de la aplicación, mentoring…
Otra cosa básica son las dailys con el equipo y las weekly con los clientes. Es la forma más efectiva que hay (obviando la presencialidad) para mantener a todo el mundo sincronizado con el desarrollo del proyecto.
¿Qué herramientas consideras que son imprescindibles para desarrollar tu trabajo?
Un buen gestor de incidencias donde se pueda ver y extraer toda la información posible y de forma clara es algo básico. También el paquete de ofimática para poder ver la documentación, realizar presentaciones, informes…
El Teams, como ya he comentado antes, es obligatorio para poder comunicarse con equipo y cliente en esta época de teletrabajo. Y el Visual Studio que nunca me falte.
Si se puede contar, ¿cuál ha sido el mayor reto o proyecto al que te has enfrentado en Kiteris?
Recuerdo especialmente sobrecogedor, el mes que estuve supliendo a una compañera con unos de nuestros clientes. Pero como digo, fue algo puntual.
Quizás la época que recuerdo con más “cariño” en cuanto a desafío, fue el año 2017. Teníamos un montonazo de desarrollos que realizar para un cliente durante ese año, y por diversas circunstancias, los programadores que no teníamos tanta experiencia tuvimos que asumir el reto. Creo que ese fue un punto de inflexión mío con Kiteris, cuando intenté “tirar de carro” en aquella difícil situación. Y bueno, parece que salió bien porque aquí sigo.
¿Qué le recomendarías o qué consejo le darías a una persona que quiere empezar a trabajar como desarrollador en Kiteris?
Puede variar dependiendo de en qué proyecto comience, donde podría ser más específico en las recomendaciones. Pero lo que no puede faltar en cualquiera de los casos es tener muchas ganas de aprender, formarse y tener una motivación constante por el crecimiento.
A nivel personal, ¿cuándo empezó esta relación con Kiteris?, ¿cómo surgió la idea de incorporarte al equipo de Kiteris?
Pues fue hace ya bastante tiempo, el 23 de noviembre del 2015. Yo había acabado mis estudios y estaba trabajando en otra empresa más relacionada con la parte de redes y sistemas. Además, un amigo y yo dejamos nuestro curriculum en el centro donde estudiamos y a principios de noviembre nos llamaron a los dos. Fuimos a hacer una entrevista y a las dos semanas estábamos haciendo las maletas para empezar a trabajar en Madrid.
¿Cómo te ves en el futuro dentro de Kiteris?
Si algo he aprendido durante tantos años en Kiteris es que la visión que iba teniendo en cada época de hacia dónde quería ir, nunca ha respondido a la realidad. Siempre ha ido por otros caminos que me han ido sorprendiendo gratamente. Por lo que he decidido ir improvisando y adaptándome a lo que nos depara el día a día.
¿Cuál es el clima laboral dentro de Kiteris?, ¿se trabaja en equipo?
La verdad que me siento genial con mi equipo. Aquí quizás debería dividirlo en dos partes. Por un lado, tengo al equipo con el que trabajo día a día en el proyecto/cliente con el que estamos. Son un equipo bastante variopinto en el cual nos lo pasamos muy bien y tenemos muy buen ambiente. Y por el otro lado, están los otros Service Manager con los cuales también nos apoyamos y ayudamos en todo lo que podamos y también tenemos una relación muy cercana.
¿Cómo es tu relación con los socios de Kiteris?
Siempre han sido muy cercanos conmigo. Al principio, cuando Kiteris era más pequeña, ya se notaba que les gustaba estar con las personas más allá de ser empleados de una empresa. Al pasar tanto tiempo en Kiteris, esa confianza ha ido en incremento hasta convertirse en esa cercanía de la que hablo.
¿Qué opinas de los valores de Kiteris?
Una de las cosas que más valoro es el querer centrarse en las personas. Cogiendo prestadas palabras de Richard Branson “Lo importante son los trabajadores. Estando ellos contentos, los clientes estarán contentos.” Haciendo foco en ellas, es donde se construye una empresa sólida.
